"Procera e Inmortal"

 
 
COLUMNA MONICA GONTOVNIK
ESPECIAL TIEMPO CARIBE. Miércoles 7 de Abril, 1999

Todavía hoy en día no entiendo esa frase ni muchas otras de nuestro himno. Cuando escribo la palabra "procera", mi computadora me la anota como inexistente. Me imagino que como Barranquilla es femenina, el autor quiso decir "prócer" femenino...
Lo de inmortal, bueno cabe decir cualquier cosa, ya que nada humano es inmortal. Y una ciudad, aunque de concreto y hierro, es humana: creada por humanos, vivida por humanos, y confirmada en su existencia, por humanos.
Nosotros, todos los que vivimos en esta ciudad, somos la ciudad.

Y ya que empecé por una frase del himno, permítanme seguir con ese tema. Y por ello, a riesgo de que se me ofendan muchos barranquilleros, quiero hacer unas preguntas acerca de quienes habitamos esta zona del planeta. Son unas preguntas que me cuestionan a mí misma también. Porque cada vez que veo es frasesita "procera e inmortal", me acuerdo de mi infancia, cuando todos los niños de la época cantaban un remedo del himno, donde cada palabra era peor que la otra. En todo caso a la frase con que comienzo esta columna se cantaba "grosera e inmoral". Seguía con algo así como: "ceñida de agua hasta Carrizal, los camiones se atrancan al pasar, y Valencia los tiene que empujar..."Por lo de Valencia, podrán deducir las fechas. Nosotros gozábamos de lo lindo cantando esa maldad, pero ahora me pregunto: qué clase de adolescentes tenía la ciudad para que cantáramos el himno sin ningún tipo de respeto?.

La mayoría de personas que conozco, de mi misma edad, son barranquilleros de pura cepa, aman a su ciudad y laboran por su buen futuro. A lo que voy es que ese canto no impidió un buen desarrollo de nuestras relaciones con la ciudad. Pero sí refleja profundamente el desprecio que TODOS, muchas veces sentimos por ella. Quien diga que no desprecia a su ciudad, que primero se pregunte:
1- Tiro basura, así sea el más mínimo papelito en sus calles, en su piel?.
2- Echo aguas servidas desde mi casa o edificio, para que ruede, horadando su rostro?
3-Detengo al bus o al taxi en la mitad de una calle?.
4- Manejo mi carro, taxi o bus, como si la vía solo fuera mía?
5-Estoy en un cargo público y lo único que me importa es el cuadre?
6-El único evento cultural de la ciudad que me apasiona, es el carnaval?
7-Cada vez que algo no me funciona, busco a un amigo de otro amigo para que me solucione el problema a mí, pero no trato de que todo funcione bien para la comunidad?
8-Como soy barranquillero, tengo derecho de hacer la bulla que me dé la gana y a la hora en que me dé la gana, sin preocuparme de los demás ocupantes del barrio?
9-Si soy motociclista, ciclista o carretillero, creo tener el derecho de ir en contravía a toda hora y de hacer zigzags con tal de pasar primero?
10-Cuando alguien te pregunta de dónde eres, tienes algo que contar de la ciudad, además de decir que su gente es muy chévere?

Bueno, este es una especie de decálogo que se me ocurre "así, de rapidez y tal." Pero imagino que todos ustedes tendrán muchas otras preguntas. ¿Qué tal si nos las empezamos a formular? Qué hacemos nosotros por nuestra ciudad? Sí la amamos? Si le devolvemos todo lo que nos ha dado, entre otras cosas, la oportunidad de vivir y crecer ...?
No será ya el momento, mientras agitamos las banderitas que se viene vendiendo estos días por las calles, de que realmente despertemos de ese letargo en que nos tiene sumidos la idea de que todo tiempo pasado fue mejor?
Qué queremos hacer todos, como colectividad, para que Barranquilla sea la pujante ciudad que merece ser: aquella sabia joven del árbol nacional y del jubilosos porvenir, crisol?